Premio a la vida y obra
de un periodista


Juan José Hoyos

El jurado reconoce con este premio al periodista y escritor antioqueño Juan José Hoyos Naranjo, quien ha dedicado más de 40 años de su vida al oficio periodístico y literario —que en su obra están indisolublemente unidos— y a la enseñanza del periodismo.

Formado como periodista en la Universidad de Antioquia, fue corresponsal del periódico El Tiempo desde finales de los setenta hasta mediados de los ochenta en Medellín, cuando el narcotráfico empezó a tejer sus redes criminales y recorrió las regiones antioqueñas más golpeadas por violencias de todo tipo; historias que en parte quedaron recogidas en la antología @**@Sentir que es un soplo la vida” donde aparece la famosa crónica @**@Los muertos fuimos cinco@**@ sobre una masacre en el municipio de Remedios.

Asimismo, se convirtió en testigo excepcional de las tropelías contra los indígenas embera del Chocó, como lo demuestra su gran reportaje @**@El oro y la sangre”, Premio Nacional de Periodismo Germán Arciniegas en 1994.

Ha sido el cronista mayor con piezas memorables como @**@Un fin de semana con Pablo Escobar@**@ o la más reciente sobre cómo excombatientes de las Farc y miembros del Ejército están limpiando de minas antipersona el municipio antioqueño de Briceño, temas que le atraen porque sabe que el periodismo narrativo es la mejor herramienta para documentar el posconflicto.

Está convencido del poder de las historias porque sabe que la gente no puede vivir sin ellas, sin las verdades que encierran. Y a los lectores les sigue alimentando la curiosidad desde su espacio dominical en el periódico El Colombiano, en donde se alternan el cronista de potente prosa y extrema sensibilidad, el novelista de Medellín, el investigador, el melómano y el ser humano que comparte sus pequeñas tragedias y alegrías cotidianas con una voz entrañable, sin dejar de ocuparse de los temas de actualidad y debate público.

Generoso con su conocimiento, ha formado varias generaciones en una escuela caracterizada por la integridad, la independencia, el valor a la hora de investigar y 14hasta el intuitivo @**@método salvaje@**@, que se inventó para que cada historia eligiera su camino. Además, contribuyó al rescate de 400 años de tradición del periodismo narrativo en Colombia con su monumental obra @**@La pasión de contar@**@.

A este maestro que dignifica el oficio, el Jurado le rinde homenaje y confía en que a partir de ahora gane más lectores, sobre todo entre las nuevas generaciones, que tanto necesitan de @**@unos buenos zapatos y un cuaderno de notas@**@ para hacer un buen reportaje, como decía su admirado Antón Chéjov.